LAS REGLAS DE
ENFRENTAMIENTO EN EL CONTEXTO OPERACIONAL
Hablar
de las Reglas de Enfrentamiento en el contexto Operacional de toda Fuerza
Militar, llámese Ejército, Armada, Aviación, es hablar, de lo que se entiende por ciencia
militar y de como evoluciona el conocimiento, los métodos y los medios para
hacer la guerra en cualquiera de sus escenarios por cuanto evolucionan de tal
forma, que han llegado a convertirse en fenómenos de naturaleza muy heterogénea.
Por
lo tanto, hoy por hoy, la conducción de
las operaciones militares –entendidas estas en su sentido más amplio− es mucho
más compleja que antes, comprendiendo un amplio espectro que abarca desde las
operaciones bélicas tradicionales de guerra o conflicto armado hasta las
operaciones no bélicas –o por así decirlo, distintas de la guerra− donde
incluso, a su vez, se entremezclan funciones militares, unas veces con otras de
naturaleza tradicionalmente policial, como lo son las relativas al
restablecimiento, mantenimiento o consolidación de la paz, para el ejercicio de
los derechos y/o libertades ciudadanas, el control de armamentos, la lucha
contra el terrorismo, el narcotráfico, el control del cumplimiento de sanciones
internacionales, la interceptación marítima, la lucha contra la piratería en la
alta mar o la ayuda humanitaria ante catástrofes naturales, etc.
Según
las circunstancias, una misma operación militar puede que lleve implícita
elementos de uno y otro tipo, que obligue su conducción simultánea tanto por
normas del Derecho Internacional de los Conflictos Armados como del Derecho Internacional de los
Derechos Humanos. Por ello, la capacidad operativa, táctica y logística de los
ejércitos entendidos en su conjunto, así como la interdependencia entre estos
factores y el desarrollo tecnológico, ha llevado históricamente de una
situación en que lo excepcional era la invención de nuevos medios y artefactos
para hacer la guerra −invención fruto a veces de la casualidad− a una época en
que la invención de nuevos medios se ha convertido en norma fundamental.
Como
nunca antes, tal situación llega acompañada, de la correlativa necesidad de
controlar el uso de la fuerza a través de mecanismos que garanticen tanto el
cumplimiento de los preceptos del Derecho de la Guerra como los objetivos
estratégicos, operativos y tácticos inherentes a toda operación militar. La
guerra, como obra humana, ha evolucionado y ese hecho hace necesario
reflexionar sobre una disciplina científica relacionada con la ciencia militar,
la Investigación Operativa, como posible –y muy probable− origen científico de
la denominación, forma y contenido de las actuales Reglas Operacionales de
Enfrentamiento - ROE.
Así
las cosas, lo primero que debe ser tenido en cuenta es el componente
esencialmente político de toda guerra o conflicto armado pues, por decirlo de
algún modo, ahí radica el componente teleológico de las ROE, esto es ¿Para qué
y a qué sirven u obedecen las ROE? En la estrategia y en el desarrollo tecnológico
encontramos la respuesta. De ello se ocupará la próxima nota académica.
ENTRATANDOSE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario